El 9 de noviembre, el piloto argentino Franco Colapinto correrá el Gran Premio de São Paulo, y todo indica que una ola de hinchas nacionales cruzará la frontera para acompañarlo. El joven corredor, una de las grandes promesas del automovilismo internacional, despierta orgullo y emoción entre los fanáticos, que ven en él la ilusión de volver a ver la bandera argentina en lo más alto de la Fórmula 1.

Brasil se prepara para recibir una gran cantidad de turistas argentinos que aprovecharán el fin de semana de carrera para combinar la pasión por el deporte con unos días de playa, calor y alegría. El país vecino continúa siendo el destino preferido por los viajeros nacionales, no solo por su cercanía y hospitalidad, sino también por las facilidades que ofrece. 

Hoy, los argentinos pueden pagar con Pix, el sistema digital que se volvió parte del día a día en Brasil y que facilita desde una cena hasta una excursión sin necesidad de llevar efectivo. La adopción de esta herramienta fue enorme: mientras en diciembre de 2024 se procesaban tres pagos por segundo, en enero de 2025 la cifra subió a diez, y a fin de ese mes alcanzó un pico de cincuenta operaciones por segundo.

Según datos de Embratur, entre enero y septiembre de 2025 ingresaron en Brasil más de 7 millones de turistas extranjeros, un aumento del 45 % respecto al año anterior. Argentina se mantiene a la cabeza, con más de 2,7 millones de visitantes. Los viajeros nacionales suelen comprar sus pasajes con unos dos meses de anticipación, viajan en grupos de tres a cinco personas y permanecen en el país alrededor de once noches.

Con temperaturas agradables, una oferta turística que se renueva y el magnetismo que genera el Gran Premio, Brasil promete un noviembre lleno de energía. Entre el rugido de los motores y el color celeste y blanco en las tribunas, el viaje se transforma en una experiencia que combina deporte, turismo y emoción.