El sol vuelve a asomar sobre Las Bahamas. Luego del paso del huracán Melissa, las condiciones en el archipiélago mejoran día a día y la vida turística comienza a recuperar su ritmo habitual. Desde el jueves 30 de octubre se levantaron las alertas para el centro y sureste del país, y los aeropuertos que habían cerrado por precaución ya están reanudando sus operaciones tras las inspecciones de seguridad.
Los principales puntos de ingreso, como Nassau y Paradise Island, Freeport, Ábacos, Eleuthera & Harbour Island, Andros, Bimini y Las Islas Berry, permanecen abiertos y operativos, listos para recibir a los visitantes que eligen el Caribe como su refugio natural de descanso y belleza.

Si bien todavía pueden registrarse algunas lluvias aisladas en zonas del centro y sureste, como Eleuthera, Harbour Island, Andros, Exumas y Long Island, los equipos locales ya trabajan en las evaluaciones posteriores a la tormenta y en la restauración de los sectores que lo necesiten. La prioridad es garantizar la seguridad de los residentes y turistas, pero también devolver el esplendor a uno de los destinos más admirados del mundo.

Con playas de arena blanca, aguas turquesa y una hospitalidad inigualable, Las Bahamas vuelve a mirar hacia adelante. Su comunidad, acostumbrada a renacer con cada desafío, demuestra una vez más su fuerza y su espíritu cálido, mientras el turismo se prepara para una nueva temporada bajo el cielo más azul del Caribe.