Sí, hay asientos en un avión que son más silenciosos que otros. Aunque los aviones más modernos son más silenciosos, volar varias horas con el sonido de las turbinas puede ser agotador. Te damos los trucos para viajar lo más tranquilamente posible.
Las intensidades de los sonidos durante el vuelo
En un vuelo hay diferentes etapas, cada una con una intensidad sonora diferente. El momento más ruidoso en un vuelo es el aterrizaje.
En la cabina, los asientos más silenciosos son los que se encuentran por delante de los motores. Es lógico: el sonido que generan las turbinas se expele hacia atrás.
Bajo la misma regla, las plazas ubicadas junto a la ventanilla son más ruidosas que las del centro del avión.
Es un principio físico: la intensidad acústica disminuye de una manera inversamente proporcional a la distancia de la fuente.
Por ello mismo, la primera clase, la business o la económica premium se ubican en la parte delantera del avión, mientras que el resto del pasaje que vuela desde las alas hacia la cola soporta un mayor bombardeo sonoro.
Si un pasajero quiere dormir tranquilo y tiene el sueño liviano debería viajar en un asiento de la fila central (o junto al pasillo, si fuera un avión de fuselaje estrecho), aunque esto implique sacrificar comodidad o ver el paisaje.
Pero el mayor ruido no son los motores, la mayor estridencia es los anuncios que se emiten por los altavoces.
Los aviones más y menos ruidosos
Aviones como el B787 Dreamliner y el A350, como son más modernos, se encuentran entre los más silenciosos.
En los aviones de doble pasillo el sonido se dispersa más que en los de pasillo único. Por ello mismo, además de la eficacia de sus motores, el A380 se considera como el avión con la cabina más silenciosa. Y eso que es impulsado por cuatro turbinas.